INTRODUCCIÓN
El libro abarca uno de los temas más atractivos en el arte: el surrealismo, cuyo origen, no obstante haber surgido en la primera mitad del siglo XX, se remonta a los orígenes mismos del arte, ya que el hombre ha mostrado desde siempre un particular interés hacia lo sobrenatural. La visión surrealista se ha mantenido vigente, enriqueciéndose a sí misma y tomando diferentes caminos. En este libro la autora parte de los referentes filosóficos y los ámbitos científico e histórico que prevalecían a finales del siglo XIX y principios del XX, lo que nos permite identificar el escenario y las fuentes sobre los cuales surge el movimiento Dadá, antecedente inmediato del surrealismo, promovido en Suiza por el poeta rumano Tristan Tzara.
Posteriormente a esto, y como un movimiento de oposición a la postura desenfrenada propuesta por el Dadá, surge el surrealismo, promovido por André Breton en París en 1924. El lector podrá reconstruir el tiempo, la historia y sus acontecimientos, y con ello captar las repercusiones que éstos tuvieron marcando el devenir de los tiempos modernos. La lectura recorre un fascinante camino que lo llevará a descubrir los conceptos que envuelven este interesante movimiento. La autora hace un énfasis particular en el concepto del surrealismo mexicano, explicando cómo es que éste antecede a la propuesta europea, ya que lo observamos desde nuestras culturas ancestrales como una forma de ser y de vivir del mexicano.
MAGRITTE
Los textos nos llevan en un ameno recorrido narrativo a conocer los antecedentes familiares y la inquietud artística que desde niño surgió en este destacado pintor de origen belga, la cual lo llevó a la búsqueda de su propio camino dentro de las artes plásticas. La personalidad de Magritte se manifiesta en los textos y en su obra permitiendo establecer una cercanía particular con el artista. Fue una obra de De Chirico la que provocó que el universo de René Magritte se abriera hacia un horizonte de inagotable creatividad. Aunque el pintor -que se establece una corta temporada en París- mostró cierto interés en la propuesta de Breton, su pensamiento va en otra dirección, apegándose a una visión más racional e imaginativa. Rompiendo en sus pinturas con el orden establecido de la forma y del tiempo, Magritte trabaja transformando el espacio con una habilidad sorprendente. Sus obras nos llevan a gozar de sus fantásticas irrealidades, inmersas en una reflexión profunda y envueltas en un gran sentido del humor. En esta obra resalta la autora cómo es que, tomando elementos de la vida cotidiana, su obra anticipa la idea del arte pop y sus reflexiones lo sitúan como el antecesor del conceptualismo. La narración también da cuenta del gran triunfo que al paso de los años este artista logró conquistar en todo el mundo. El pensamiento de Magritte ha sido captado en este libro con profundidad aunque a la vez con gran pureza y sencillez, lo que permite al lector comprender su enfoque surrealista con claridad y, de ahí, advertir las grandes aportaciones que este artista logró para el arte contemporáneo.
CASTAÑEDA
En esta ocasión, dentro de la amplia gama de artistas surrealistas mexicanos, Lupina Lara ha elegido acompañar al pintor belga con la extraordinaria obra del artista mexicano Alfredo Castañeda, arquitecto de profesión, originario de la ciudad de México, que en la actualidad radica en España. Al igual que Magritte, este pintor jamás se planteó la idea de formar parte del cártel surrealista; su obra participa en este movimiento más por accidente que como un acto premeditado. El interés de mostrarlos juntos parte de diferentes coincidencias y de los enfoques que la autora encuentra en sus obras, entre ellos la visión reflexiva, ya que ambos son pintores del pensamiento. En estas obras, que abarcan argumentos tan distantes, Lupina Lara encuentra el misterio, la sugerencia y la incógnita como factores en común. La calidad pictórica y de estructura de estos trabajos, en los que el realismo alimenta las más sublimes y poéticas irrealidades, es otro de los motivos que los ha llevado a participar en este planteamiento que a primera vista podría parecer descabellado. El interés mayor que este libro contiene es el de ofrecer al lector nuevas lecturas del arte. La obra de Castañeda coincidió en el pasado con la obra de Magritte, de manera casual, al participar ambas en una exposición de surrealismo en la ciudad de Colonia, Alemania, en 1971. Así es como ella se ha referido a la obra del pintor mexicano: "El universo de Castañeda es poético y místico por excelencia, pero además es virtuoso en su técnica como en su capacidad de hacer visibles las ideas. Y es dentro de estos parámetros de la poesía de pensamiento filosófico, de la categoría intelectual y de la excepcional calidad de su trabajo lo que me ha motivado a poner sus obras juntas sobre la mesa para recrearnos, para deleitarnos en sus argumentos y en el diálogo que de ellos y entre ellos se produce".
Lupina Lara comparte el sentir y el despertar al arte de Alfredo Castañeda. Nos involucra en su mundo, y desde ahí nos permite gozar de la simbología, los secretos y fantasías en los que la obra se desdobla. Lo genial es que la obra de Castañeda habla en todos los idiomas; no hace excepción de edades, ni de posiciones. Su obra es generosa, ingeniosa y de una riqueza conceptual inigualable. ©2013